Cristian : Tejedores de historias

Mi nombre es Cristian, tengo 25 años y actualmente vivo en Riofrío, Valle del Cauca, un lugar que considero mi hogar y el escenario de muchos de mis sueños y aprendizajes. Estoy cursando el décimo semestre de Trabajo Social, una carrera que refleja mi pasión por el bienestar social. Mi familia, compuesta por mi papá, un electricista dedicado; mi mamá, un pilar fundamental en mi vida; y mi hermana menor, estudiante de grado once, ha sido mi mayor apoyo en este recorrido.
Mi relación con FUNDAEC comenzó en 2016, cuando conocí el programa Preparación para la Acción Social (PAS). Me atrajo su enfoque innovador, que no solo reforzó mis estudios, sino que también fortaleció el vínculo con mi familia. Durante mi participación en el programa, enfrenté desafíos que me llevaron a dudar de mis capacidades. Sin embargo, el
apoyo de mis mentores y de mi madre fue crucial para que decidiera seguir adelante y completar mi formación. En 2018 me gradué del programa PAS y, más tarde, me convertí en tutor y coordinador del programa en Tuluá. También completé el Técnico en Gestión Social y Comunitaria y otros cursos que fortalecieron mis competencias profesionales. Fui apoyado por el Fondo Solidario del programa de Apoyo a Líderes Comunitarios, que me permitió financiar mis estudios universitarios.
FUNDAEC ha transformado mi vida, inculcándome valores como el amor y el servicio.Sueño con una comunidad en la que la educación integral sea el eje central, promoviendo una cultura de colaboración y servicio. Visualizo a los jóvenes desempeñando roles activos, articulados con instituciones locales para impulsar el bienestar colectivo.
Para mí, FUNDAEC significa amor en su máxima expresión. Es ese amor que impulsa a servir, a crecer y a contribuir al bienestar de los demás. Gracias a FUNDAEC, he tenido la
oportunidad de conocer a personas maravillosas y de involucrarme en proyectos que han
dejado una huella positiva en mi vida.
Hoy, mi trabajo con FUNDAEC me ha permitido vivir alineado con mi propósito: contribuir al desarrollo de mi comunidad. Estoy profundamente agradecido por cada aprendizaje, cada reto superado y cada oportunidad que me ha permitido ser mejor y, sobre todo, útil a quienes me rodean.